"Durante mi viaje por Chile, nunca habría imaginado que mi estancia en Frutillar sería lo que más se me quedaría grabado. Si buscas ocio, aventura o un poco de ambos... aquí lo encontrarás todo. Guillermo, que bien podría ser el alcalde de Frutillar, es el anfitrión más acogedor y generoso que se puede pedir. En su casa rústica y sostenible, construida desde cero, comimos bien y bebimos bien. Sentados en el balcón, desde su jardín, se ven volcanes y una fresca masa de agua a lo lejos. Frutillar es majestuoso. Guillermo es una leyenda. Su casa es un sueño. Volveré"